jueves, junio 16

Hoy por la mañana abrí los ojos con una astilla de tristeza anclada al corazón... una sensación gris y muda... así nada más... sin más.

Gris melancolía...
cual herida provocada
por un dardo de cristal,
o una astilla invisible
o una espina de sal...
como un trozo de vidrio candente
incrustado en cada palpitar...

(abrí los ojos... más no quise despertar)